Monday, 15 June 2015

Lectura en Inglés de La Noche Antes de Navidad

Uno de los cuentos más famosos durante la época de navidad es: "La Vispera de Navidad" o "The Night Before Christmas" de Clement Clarke Moore. Este hermoso cuento nos relata la inesperada sorpresa que tuvo una familia al resivir la visita de Santa Claus. Esta pequeña historia además de ser hermosa es también muy lúdica y muy apropiada para una lectura para el aprendizaje del inglés.

Y como buenos aprendices de este idioma, aprovecharemos este cuento mediante su lectura y la escucha de las pronunciaciones de las diversas palabras del texto.

The Night Before Christmas
La Vispera de Navidad  

Twas the night before Christmas, when all through the house not a creature was stirring, not even a mouse.

The stockings were hung by the chimney with care in hopes that St. Nicholas soon would be there.

The children were nestled all snug in their beds while visions of sugarplums danced in their heads.

And Mamma in her 'kerchief and I in my cap had just settled our brains for a long winter's nap.

When out on the lawn there arose such a clatter, I sprang from the bed to see what was the matter.

Away to the window I flew like a flash, tore open the shutters and threw up the sash.

The moon on the breast of the new-fallen snow gave the lustre of midday to objects below.

When what to my wondering eyes should appear, but a miniature sleigh and eight tiny reindeer.

With a little old driver so lively and quick, I knew in a moment it must be St. Nick.

More rapid than eagles his coursers they came, and he whistled, and shouted, and called them by name; "Now, Dasher! Now, Dancer! Now, Prancer and Vixen! On, Comet! On, Cupid! On, Donder and Blitzen! To the top of the porch! To the top of the wall! Now dash away! Dash away! Dash away all!" As dry leaves that before the wild hurricane fly, when they meet with an obstacle mount to the sky.

So up to the housetop the coursers they flew with the sleigh full of toys and St. Nicholas too.

And then in a twinkling I heard on the roof the prancing and pawing of each little hoof.

As I drew in my head and was turning around, down the chimney St. Nicolas came with a bound. He was dressed all in fur from his head to his foot, and his clothes were all tarnished with ashes and soot.

A bundle of toys he had flung on his back and he looked like a pedlar just opening his pack.

His eyes--how they twinkled! His dimples, how merry! His cheeks were like roses, his nose like a cherry! His droll little mouth was drawn up like a bow and the beard of his chin was as white as the snow.

The stump of his pipe he held tight in his teeth and the smoke it encircled his head like a wreath.

He had a broad face and a round little belly that shook when he laughed like a bowlful of jelly.

He was chubby and plump, a right jolly old elf, and I laughed when I saw him in spite of myself.

A wink of his eye and a twist of his head soon gave me to know I had nothing to dread.

He spoke not a word, but went straight to his work and filled all the stockings, then turned with a jerk, and laying his finger aside of his nose, and giving a nod up the chimney he rose. He sprang to his sleigh, to his team gave a whistle and away they all flew like the down of a thistle.

But I heard him exclaim, ere he drove out of sight, "Happy Christmas to all. And to all a good night."
Era la noche antes de Navidad, cuando en la casa todo era paz. No se oía ni un ruido, ni siquiera el chillido de un ratón.

Junto al fuego colgaban los calcetines vacíos, seguros que pronto vendría Santa Claus.

Sobre la cama, acurrucaditos y bien abrigados, los niños dormían, mientras imaginaban alegres dulces y bombones danzar.

Y mamá con pañoleta, y yo con gorro de dormir, nos disponíamos para un largo sueño invernal.

De pronto en el prado surgió un alboroto, salté de la cama y fui a ver qué pasaba.

Corrí hasta la ventana, abrí las persianas y tiré del postigo.

La luna sobre la nieve recién caída le daba a los objetos un brillo de mediodía.

Cuando para mi asombro vi pasar a lo lejos, un diminuto trineo y ocho pequeños renos.

Con un viejecito, vivaracho y veloz, Y supe en seguida que debía ser Santa Claus. Más rápido que las águilas, sus corceles volaban. Y silbaba y gritaba y a sus renos ¡por su nombre llamaba!
– ¡Vamos Destello! ¡Vamos Danzarín! ¡Vamos Cabriolero y Brujo! ¡Corre Cometa! ¡Corre Cupido! ¡Corran Trueno y Chispa! ¡A la cima del techo! ¡A la cima del muro! ¡Vamos apúrense! ¡Apúrense! ¡Apúrense todos!
Como las hojas que vuelan antes de un fuerte huracán, que cuando se topan con un obstáculo remontan al cielo.

Así volaron los corceles hasta posarse en la casa, Con el trineo lleno de juguetes y Santa Claus también.

En un parpadear, sobre el techo escuché los pequeños cascos de los renos patear y al volver la cabeza, entre cenizas y troncos, por la chimenea de golpe cayó Santa Claus.
Abrigado con pieles, de la cabeza a los pies, Santa Claus se encontraba todo sucio de hollín.

Llevaba en sus espaldas un saco de juguetes y parecía un buhonero abriendo su paquete.

¡Cómo brillaban sus ojos! ¡Qué felices sus hoyuelos! Sus mejillas como rosas, ¡su nariz como cereza! Su graciosa boca con una mueca sonriente y la barba de su mentón tan blanca como la nieve.

Sujetaba firme entre los dientes la boquilla de una pipa y el humo rodeaba su cabeza a modo de guirnalda.

Tenía una cara amplia y su panza redonda. Temblaba al reírse como un pote de gelatina.

Era gordinflón y rollizo, como un duende gracioso y apenas lo vi me eché a reír sin querer.

Al ver su modo de parpadear y mover la cabeza, pronto me di cuenta que no había nada que temer.

No dijo una palabra y volvió a su trabajo, Llenó bien los calcetines, luego su cuerpo sacudió. Y colocando su dedo a un costado de la nariz e inclinando la cabeza por la chimenea salió. Saltó a su trineo y a sus ayudantes silbó y arrancaron volando como la pelusa de un cardo.

Pero llegué a escucharle mientras desaparecía "Feliz Navidad a todos y que tengan una buena noche".

No comments:

Post a Comment